Mirando como consumidor

Muchas veces he pubicado post acerca de mis productos y cómo mis clientes han reaccionado a éstos. Creo haber mencionado del proceso de diseño y la relación que genero con mis 'consumidores', donde lo que más destaco es mi disposición a informarles acerca de los beneficios y perjuicios de ciertas decisiones en realción a los productos. Se genera una suerte de diálogo en el que la confianza comienza a aflorar a medida que más preguntas van surgiendo. Es una construcción sumamente delicada, pero necesaria para poder ser transparente y que el resultado final sea en un 100% reflejo de las conversaciones, y si en algún sentido se presenta alguna situación anómala, queda claramente establecido que fue prevista y notificada al cliente, y éste asume el riesgo.
Luego de esta introducción, quiero mostrar un ejemplo de lo que pasa cuando estoy en el lado del cliente, y realmente descubro que no tengo preguntas ni soy lo suficientemente crítico para informarme acerca de lo que me ofrecen y que puede llegar a perjudicarme, claro está, 'sin saberlo'. Y por qué preguntar si lo que sale en la TV es bonito y me llena de promesas de satisfacción, se asume como 'normal' y aceptado por la sociedad, más aún cuando logra traspasar las barreras sanitarias que se supone deberían resguardarnos de 'productos potencialmente dañinos'.
Los cigarrillos tienen la virtud de ser notoriamente catalogados como veneno, y las personas asumen el riesgo, pero cuando Alondra me dice que la Coca Cola ZERO está prohibida en algunos países no me queda otra opción que despertar. O sea, cómo puede un producto con un componente cancerígeno andar circulando libremente en nuestros supermercados. Y además, por qué no lo sabía antes de beberla? Nadie puso un Don Miguel en la etiqueta ni se hace referencia del daño...
Si yo ocultara algo en mis productos sería lisa y llanamente una falta de ética, y peor aún , estaría siendo el autor intelectual y material de un posible delito si alguien resultara dañado por ese acto de irresponsabilidad.
Ahora bien, de quién es la culpa, de quien me vende el producto o mi culpa por no saber informarme y ser consecuente con mi autoprotección. Creo que en eso quedó la conversa con Alondra... esperaré tus comentarios :)

Esta información la obtuve en Wikipedia:

Es una versión con pocas calorías y sin azúcar. Edulcorada con Aspartamo (E951) y Acesulfamo-k (E950). Al contrario de lo que se cree, Coca-cola Zero no es una bebida con cero calorías, contiene 0.5kcal por 100ml (no obstante, en países como Chile la información nutricional afirma que contiene 0.0 Kcal por 100 Ml; Además, en la versión producida en Chile, a los edulcorantes citados se le añade también Ciclamato de Sodio, una sustancia que en países como EEUU o Japón está prohibida por ser potencialmente cancerígena). La palabra Zero en el nombre quiere indicar que no tiene azúcar.
La principal diferencia con Coca-Cola Light está en el sabor y la diferencia en la proporción usada de Aspartamo/Acesulfamo-k, siendo el contenido calórico muy similar y el contenido de azúcar cero en ambas.

En el recipiente se puede leer que es una fuente de Fenilanina, siendo ésta un componente del Aspartamo mencionado anteriormente.

A INFORMARNOSSSSSS!!!