Mi blog ha sido testigo de mis constantes pataletas a causa de la lentitud de los cambios en la Escuela de Diseño de la FAU, lugar donde recibí mi formación para ser profesional. De la lista interminable de falencias ya puedo decir que al menos la parte tecnológica está sufriendo una transformación más que positiva, todo parte del cuestionado proyecto MECESUP.Uno de los aportes es la llegada de dos máquinas que ejecutan procesos con la simple intervención de un computador: una grabadora/cortadora laser y una Router de 2/3 ejes. Fui contactado por el coordinador del área de multimedios para participar del concurso para optar a ser uno de los encargados del laboratorio, y favorablemente estoy en el equipo junto a 3 profesionales, 2 diseñadores industriales y un arquitecto.
Hay muchos ojos puestos en este laboratorio, sobre todo para generar proyectos de investigación, además del servicio para los alumnos y a terceros,aunque en esta primera etapa recién nos estamos familiarizando con la maquinaria y entendiendo como equipo y que es, a mi parecer, lo más complicado de un proceso de este tipo. No tengo ninguna duda que vamos a enfrentar este desafío con todo el rigor y profesionalismo que se nos exige, y que muy pronto ya estaremos cambiándole la cara a una de las áreas más débiles de la formación del diseñador de la Chile.
Y de muestra, unas fotos de uno de los proyectos del curso de Modelamiento de 3º año. Todo el desarrollo es de Alondra, y consistió en el modelamiento 3D en Inventor, el traspaso de las huellas a Corel, y desde ahí a la laser, cortando madera de balsa de 3mm y acrílico también de 3mm.
A mí parecer la mayoría del curso cumplió bastante bien con las indicaciones para generar sus partes y piezas, además que nos sirvió para generar parámetros básicos y reconocer cuáles son los materiales más adecuados para cortar y grabar. ¿Y el tiempo de corte? Si fueron 5 minutos es mucho decir. Una pega que a puro tiptop demoraría un día y con un oficio dudoso, esta maquinita la convierte en el descanso absoluto.
Y el proyecto se trata de una mecedora con forma de mariposa, diseñada en un principio para niños con cierta discapacidad motriz y estimular la tonicidad en los músculos con movimientos similares a los obtenidos en esferas gigantes. El toque mágico se lo dan las 'alitas' como mariposa, y que tiene un significado más allá del sentido lúdico, sino que representa el cambio por el que atraviesa un mariposa, parcialmente inerte en un comienzo, para luego contar con alas y lanzarse al vuelo.
