Aprovechando el vuelito de la PSU, de los momentos tensos en que jóvenes escolares acaban de salir de sus reductos pingüinísticos (cariñosamente), para ingresar a un mundo aún más competitivo y exigente, qué mejor que aportar con un artículo que habla precisamente de un enfoque para una educación creativa, no solamente relacionada con las escuelas de Diseño, sino que una visión global que comience en nuestros colegios.
A Álvaro Magaña lo conocí en una clase de mi Diplomado CAD, invitado por Rodrigo Walker, y claramente marcó una diferencia su participación, consciente y muy vinculado con la calidad de la educación que se imparte en Universidades e Institutos.
Creo que de haber leído un artículo como éste, más todos los que he devorado desde diferentes blogs y las conversaciones en el Diplomado, otra hubiese sido mi visión para saber qué exigirle a mis profesores y a mi Escuela, además de saber hacia dónde aportar desde mis tempranos pasos en Diseño... aunque nunca es tarde para rediseñar el futuro, menos en mi profesión, jeje.
Bueno, les dejo el link para que se hagan una opinión y disfruten de una conversación enriquecedora con el autor.
1 comentarios:
Bueno, qué se le va a hacer. un abrazo y gracias por decir lo que dices. No nos queda otra que andar despiertos por el mundo de los sueños.
Publicar un comentario