Resultó casi de la nada y nos quedamos hasta las 2 de la madrugada echando la talla y compartiendo con mis mejores amigos y amigas en Las terrazas del Plaza Vespucio.
Reitero mis disculpas a Sandra y Margarita por no haber sido muy específico en las indicaciones para llegar al local y haberlas hecho pasar por calles oscuras y despobladas de la zona :)
Estuvo entrete aunque las caras de cansancio se aprecian en algunos de los invitados, así que más valoro que hayan podido ir a acompañarme en esta humilde celebración.
Al día siguiente (o sea hoy) mis padres y mi hermana me celebraron con una espectacular torta de lúcuma, ñami ñami!
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