Me encuentro desarrollando una parrilla que proyecte una cuadrícula hacia un objeto. Para ello llegamos a la conclusión que debían emplearse punteros láser debido a las propiedades lumínicas tan particulares de su haz.
(El puntero me costó 450.- pesos y lo compré en la galería Copa, en San Antonio 705)
Hasta ahí todo iba bien, pero el puntero proyecta un punto mientras que lo que necesitaba era una línea, así que me puse a buscar boquillas que permitieran variar el haz hasta obtener lo requerido.
Para mi mala fortuna, en ninguna parte encontré la solución por bajo costo e inmediata. Medio desesperanzado comencé a jugar con el puntero hasta que vi el efecto que producía al pasar a través de una botella y me dí cuenta que eso necesitaba, o sea, un elemento cilíndrico, transparente y de un diámetro reducido.
Busqué y busqué en San Diego, San Antonio, Internet (incluso mi polola me trajo desde 'Todo a Mil' una lupa laminada que permite refractar el haz), y lo más cercano a lo que me servía lo encontré en 'Arquitectura Librería' y son unas varillas de acrílico de 1,5mm de diámetro.
Pensé en hacer una especie de cama donde apilar horizontalmente las varillas, pero era una solución algo costosa, así que al final opté por recortar la varilla y pegarla justo en la salida del haz y obtendría el mismo resultado, pero mucho más práctico y económico.
En este video explico el proceso en tiempo real, casi minuto y medio y listo.
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